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Toda la vida que en milenios aconteció

Siento que tengo las llaves del ayer, puerta por la que puedo penetrar a mi gusto, ventana sin cortinas para observar el paso de llamas adornadas con zarcillos y campanillas siguiendo a sus pastores, bailarines, músicos con quenas, antaras y tambor. Fiesta ideal, sol que acaricia el alma, país donde vive la armonía.

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